-Lo peor es que se rumorea que fue José, el de finanzas.
+Pero él está muy anciano para hacer semejantes cosas.
-Eso pensé hasta que lo vi nervioso esta mañana hablándose a si mismo
+Ahora que lo mencionas, yo lo vi afilando unos lápices.
-¿Lápices? ¡Si es con eso que mataron a Don Pedro!